COQUIMBO – PORTO ALEGRE
COMO PUENTE ENTRE ASIA PACÍFICO
El significado para la integración en los niveles de la infraestructura física, económica, cultural y social del corredor bioceánico central.
Por: Ing. Claudio Teitelbaum
Cámara de Comercio e Industria de Brasil – Chile.
Comieté de Rutas de Integración de América del Sur.
ADECUANDO CAMINOS
Esta conexión, posee una extensión de 2.472 km de um trazado ya existente, presenta un cuello de piedra en la travesía de los Andes lo que en este momento impossibilita el libre tránsito en la Cordillera en determinadas épocas del año y cuenta con carencias en tramos de carreteras.
Además, en el caso de la autovía brasilera BR-290 necesitará ser duplicada en toda la extensión de la capital del Estado, Porto Alegre, hasta la ciudad de Uruguaiana, en la frontera con Argentina.
Estos temas se discutieron en el año 2015 en seis oportunidades en el ámbito del sector público y del sector privado en Rio Grande do Sul, con amplitud al Poder Ejecutivo contemplando al Gobernador, Vicegobernador y las Secretarías de Estado involucradas. Se habló también en la Asamblea Legislativa en dos ocasiones, en la audiência pública promovida por la Comisión del Mercosur con la Federación de las Industrias, FIERGS, y la Universidad, siempre con amplia participación de la Cámara de Comercio e Industria Brasil-Chile, CCIBC-RS, y del Comité de las Rutas de Interacción de América del Sur, CRIAS.
Se puede afirmar que, derivada de las reuniones en el Poder Ejecutivo, hubo desdoblamiento de acciones de autoridades estatales con autoridades federales para la inclusión de la duplicación de la autovía BR-290 en la planificación federal, lo que efetivamente no se materializo a la velocidad y tiempo necesarios. Sin embargo y a pesar de estas carencias, el 50% de todas las exportaciones de Río Grande do Sul a Chile y el 63% de las importaciones ocurren vía terrestre, pasando por el Puerto Seco de Uruguaiana.
UN ANHELO MUY CERCANO
En cuanto a la información de las autoridades chilenas (Intendencia de Coquimbo), los Congresos de Chile y Argentina, se anunció que ya se aprobó proyecto de construcción del Túnel de Agua Negra y que el Banco Interamericano de Desarrollo ya formalizó el financiamento en el monto de U$ 1.5 mil millones, lo que garantiza la ejecución de las obras, así como los aspectos relacionados con la gobernanza y gestión multinacional.
Se sabe que este Corredor no será el único en un futuro próximo en interconectar ambos océanos en América del Sur. Pero tiene todo para ser el primero. Los aspectos económico, cultural y social para Argentina, Brasil y Chile y para América del Sur en su conjunto son evidentes y salta a la vista con la simple visualización del mapa de la región em cuestión.
ASIA, CADA VEZ MÁS CERCA
El Corredor Bioceánico Central colocará a la subregión en contacto directo con los países de la región Asia-Pacífico y será el eslabón más fuerte de la corriente de integración sudamericana con otras regiones y subregiones, usufructuando de la multilateralidad y de los acuerdos internacionales ya vigentes y en estructuración.
Este corredor colocará de forma innovadora y definitiva a América del Sur en el escenario de la integración global al conectar los Océanos Atlántico y Pacífico favorecendo el pleno desarrollo armónico en los segmentos económico, cultural y social que han estado ausentes por falta de uma infraestructura física y organizacional adecuada.
Bajo la óptica cultural y social las perspectivas son alentadoras a la luz de los estudios ya realizados. Este
Corredor debe ser visto como prerrequisito para la mejora continua de la calidad de vida en la subregión, proporcionando las condiciones para que ésto ocurra. La tendencia es que la misma experimente innovaciones em servicios, productos y procesos.
RESPONSABILIDADES MÁS QUE ATRIBUCIONES
El Corredor Bioceánico Central colocará a la subregión en contacto directo con los países de la región Asia-Pacífico y será el eslabón más fuerte de la corriente de integración sudamericana con otras regiones y subregiones, usufructuando de la multilateralidad y de los acuerdos internacionales ya vigentes y en estructuración.
Este corredor colocará de forma innovadora y definitiva a América del Sur en el escenario de la integración global al conectar los Océanos Atlántico y Pacífico favorecendo el pleno desarrollo armónico en los segmentos económico, cultural y social que han estado ausentes por falta de uma infraestructura física y organizacional adecuada.
Bajo la óptica cultural y social las perspectivas son alentadoras a la luz de los estudios ya realizados. Este Corredor debe ser visto como prerrequisito para la mejora continua de la calidad de vida en la subregión, proporcionando las condiciones para que ésto ocurra. La tendencia es que la misma experimente innovaciones em servicios, productos y processos.
